Hamás utiliza hospitales y otros lugares protegidos como escuelas y mezquitas para fines terroristas. Desde 2006, hemos visto informe tras informe mostrando justo eso. Un documental del Servicio Público de Radiodifusión de Estados Unidos mostró a pistoleros de Hamás recorriendo los pasillos del Hospital Al-Shifa, intimidando al personal y negando el acceso a áreas protegidas.
Sin embargo, desde que Israel lanzó su invasión terrestre de Gaza, esto ha sido repentinamente cuestionado. Mucha gente no quiere creer a los israelíes; parece que preferirían creer a Hamás. Los medios de comunicación a menudo ponen advertencias a los anuncios de las FDI, señalando que lo que afirman no puede ser verificado de forma independiente.
Raramente, sin embargo, se cuestionan de tal manera los informes procedentes de Gaza. Muchos de los que piden un alto al fuego pueden tener buenas intenciones, pero en la práctica están diciendo que Israel debería dejar de defender a su población y que Hamás debería vivir para luchar otro día.
Los líderes políticos están jugando a favor de Hamás al señalar con virtud implicaciones de que Israel no está adhiriendo a las leyes de guerra e infringiendo bajas civiles innecesarias cuando saben que esto no es cierto. El escritor, Col. Richard Kemp, un ex comandante de las fuerzas británicas en Afganistán, fue presidente del comité de gestión de crisis nacional del Reino Unido, COBRA.