El ejército informa que no había israelíes a bordo del buque; el Primer Ministro dice que la incautación del barco constituye una ‘escalada significativa en la agresión de Irán contra los ciudadanos del mundo libre’.
Los rebeldes hutíes de Yemen secuestraron un barco de carga arrendado por Israel y los 22 tripulantes a bordo, informaron los medios sauditas.
El buque, llamado Galaxy Leader, que transportaba automóviles desde Turquía, fue capturado en el sur del Mar Rojo en ruta hacia la India. Está registrado bajo la bandera de las Bahamas y tiene a Nassau como su puerto base.
El Primer Ministro Benjamin Netanyahu calificó el incidente como un «ataque iraní contra un buque internacional». «El barco, propiedad de una empresa británica y operado por una firma japonesa, fue secuestrado bajo la dirección iraní por la milicia hutí en Yemen», se lee en un comunicado de su oficina. «El buque tenía 25 tripulantes de varias nacionalidades, incluyendo ucranianos, búlgaros, filipinos y mexicanos; no había israelíes a bordo. Esto es otro acto de terrorismo iraní, que representa una escalada significativa en la agresión de Irán contra los ciudadanos del mundo libre, y tiene implicaciones internacionales para la seguridad de las rutas de navegación global».
Las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) calificaron el secuestro del barco de carga como «un incidente muy grave de consecuencia global». El ejército añadió que el barco estaba «tripulado por civiles de varias nacionalidades, no incluyendo israelíes. No es un barco israelí».
Más temprano el domingo, los hutíes, respaldados por el archienemigo de Israel, Irán, declararon su intención de atacar cualquier barco que lleve la bandera israelí, o sea propiedad/operado por empresas israelíes. En su declaración, instaron a los países a evacuar a sus ciudadanos de tales barcos y aconsejaron no usarlos para transportar bienes. También instaron a las naciones a notificar a estos barcos que se mantengan alejados de sus puertos.